La situación financiera del holding agroindustrial Valle Arriba, ligado al empresario Gastón Cardemil, parece complicarse aún más. Considerado uno de los mayores productores de aceite de oliva del país, el grupo solicitó el año pasado la reorganización judicial de Valle Arriba SpA, filial que elabora los aceites Kardamili y Mestre, y ahora RaboFinance pidió la liquidación forzosa (quiebra) de Agroindustrial y Comercial Valle Arriba Ltda.

En su presentación judicial, RaboFinance argumentó que su solicitud de liquidación de la sociedad ligada a Cardemil (quien además es su representante legal) se relaciona con un crédito por casi US$5,6 millones más intereses que otorgó en septiembre de 2015 a Agroindustrial y Comercial Valle Arriba.

Tras ser prorrogado y repactado en 11 oportunidades, dijo el banco, “la empresa ha cesado en el pago de más de una obligación para con RaboFinance, ascendentes a US$1,19 millones, equivalentes a $1.154 millones”.

Pese a reiterados intentos, La Segunda no logró contactar a Gastón Cardemil, constatando en el proceso que varias de las páginas web de sus empresas no se encuentran operativas, entre ellas, las de Valle Arriba, Grupo Esparta y Haras Carioca.

La caída financiera de las empresas de Cardemil, quien también participa en el negocio inmobiliario, se originó por la baja de los precios internacionales que experimentó el aceite de oliva.

“En el año 2020, la situación se fue complejizando, puesto que el precio volvió a bajar considerablemente hasta los US$2,5 por kilo, cuestión que no había ocurrido nunca en la historia del mercado”, afirmó al solicitar la reorganización de Valle Arriba SpA en enero del año pasado.

Hijo del destacado empresario agrícola Jorge Cardemil (impulsor del riego por goteo en Chile, del tomate Rocky y creador del juego de azar Kino, entre otros), Gastón Cardemil ha desarrollado su actividad profesional en torno a la agricultura, desde la cual controla el campo Los Lirios y Hacienda Tabalí, Ovalle (que solo produce olivos orgánicos).

El 23° Juzgado Civil de Santiago rechazó los recursos presentados por Santa Teresita y el Fondo Privado 180, pertenecientes a Alvaro y Antonio Jalaff y a los hermanos Menichetti, que buscaban levantar la medida precautoria que impide a los Jalaff vender sus acciones del Grupo Patio. Esta última, concedida en febrero, fue solicitada por Rodrigo Topelberg, socio minoritario de Factop, que alegó que si los Jalaff vendían su participación no tendrían patrimonio para pagarle los daños que estimó en $10.490 millones, producto de las ventas de facturas de ventas falsas para financiar a los Jalaff.

-¿En qué estás?

-Este mes vamos a aterrizar en Argentina, porque nos llamaron organizadores de torneos de atletismo. Vamos a sumar el rugby y hockey allá y en Chile a nuestra plataforma. Esperamos cerrar en abril una ronda de financiamiento por US$1,3 millones con inversionistas privados para potenciar Chile y Brasil, a donde entramos el año pasado. También estamos presentes en Perú y Ecuador con atletismo. Tenemos 180 clientes que han organizado 700 torneos desde 2021.

-¿Cuál es tu sueño?

-Mi sueño es tener el deporte en un solo lugar, entregando una experiencia profesional a deportistas amateur para que tengan un lugar donde disponer de todos tus registros. Si no eras profesional no estabas en ninguna parte y con nuestra startup eso cambió y están todos los datos centralizados. Tenemos 55 mil deportistas registrados que compiten en Chile. Queremos entrar a México a principios de 2025, después a Colombia. Y en 2026, a Estados Unidos.

Clínica Las Condes (CLC), controlada por la empresaria Cecilia Karlezi, informó a la CMF que el 1 de marzo fue notificada de una demanda arbitral de las isapres Banmédica y su relacionada Vida Tres, reclamando el pago de $15.816 millones por descuentos que se les adeudarían.

En respuesta a la consulta de la CMF, la clínica explicó que éstas solicitan el pago de los descuentos que, según ambas isapres, deberían generarse durante el curso del arbitraje. Banmédica y Vida Tres también pidieron el cumplimiento de los convenios con CLC “en los plazos señalados en los mismos, por los períodos posteriores a su término, que tuvo lugar el 1 de marzo pasado”.

CLC agregó que “contestará la demanda solicitando el rechazo íntegro de la pretensión económica, y demandará (a las isapres) para obtener el pago de las sumas que se determinen en función de los análisis de las auditorías en curso, que, preliminarmente, ascienden a $60.486 millones”.

El bitcoin y el oro cerraron ayer marcando nuevos récords históricos en su cotización .

La moneda virtual superó por minutos, pasado el mediodía, los US$69,210, registrando un nuevo máximo histórico, aunque cerró la jornada en los US$63.285. Con ese peak, el bitcoin perforó más de dos años después su anterior marca de US$69.000 del 9 de noviembre de 2021.

En la misma jornada, el oro alcanzó un nuevo precio récord impulsado por un eventual cambio de rumbo de la Fed (el Banco Central de EE.UU.) respecto su tasas de política monetaria y por los riesgos geopolíticos. El metal subió un 1,3% hasta los US$2.141,6 la onza al contado y esta mañana se mantenía con un alza de 0,78% a US$2.144,8.