El Plan de Emergencia Habitacional, cuya meta es entregar 260 mil viviendas durante la gestión del Presidente Boric (2022-2025), no se cumplirá en el plazo establecido, concluye un informe de Libertad y Desarrollo (LyD).

A noviembre último se registra un avance de 35%, es decir, se han terminado 92.093. Y del resto, hay 125.191 viviendas que se encuentran en ejecución, lo que equivale al 46% de la meta..

El atraso en el plazo comprometido por el Gobierno, según LyD, se debe a la cantidad de viviendas que se está entregando por mes. En promedio han sido casi 6 mil unidades mensuales y a ese ritmo la meta del plan se cumpliría en marzo de 2026, un año después de lo prometido.

Otro punto que observa el estudio de LyD es que de las viviendas finalizadas a octubre de 2023, el 75% había iniciado su construcción en el gobierno de Sebastián Piñera.

Basado en una metodología que considera al 60% de la población con menos recursos y excluye a familias unipersonales en el allegamiento interno, el informe también evidencia el desarrollo de esta realidad en los últimos 16 años. Según el centro de estudios, el déficit habitacional no ha podido ser reducido y aumentó un 9% entre los años 2006 y 2022.

El estudio aborda las características del déficit y detalla que en la región Metropolitana está concentrado el 62% de las necesidades de vivienda.

Asimismo, evidencia un aumento significativo de los hogares extranjeros con carencia habitacional. Si en 2006 correspondía solo a un 2% en 2022 estos hogares representaron un 34% del total.

En esta misma línea, los hogares sufrieron una disminución en su tamaño familiar. Hoy en día, los hogares están compuestos por 2,8 personas. Y se registra un aumento en los hogares unipersonales. El informe arroja que solo un 25% de las familias con déficit habitacional está tomando medidas para postular a algún tipo de solución, lo que hace imperioso revisar los mecanismos para postular a viviendas sociales, advierte LyD.

“Es urgente que, dado el aumento en los requerimientos, se pongan metas más ambiciosas, se refuerce la gestión habitacional y se agilicen los procesos para una solución a las familias que llevan años esperando por una vivienda definitiva, especialmente en los programas que son para los grupos más vulnerables”, asegura Ly D

Codelco y el sindicato de supervisores de la división Chuquicamata alcanzaron un acuerdo por adelantado en el proceso de negociación colectiva.

Este nuevo convenio considera a 658 trabajadores, tendrá una vigencia de 36 meses y comenzará a regir el 1 de abril. La firma estatal no comunicó los detalles económicos del convenio.

“El acuerdo promueve, a través de incentivos, el cumplimiento de metas y el mejoramiento de la productividad, con foco en el ejercicio del liderazgo para mejorar la competitividad del negocio divisional. Asimismo, mantiene y moderniza las actuales condiciones y beneficios para la supervisión”, afirmaron desde la estatal en un comunicado.

Desde la minera valoraron el carácter del acuerdo: “Codelco agradece y valora el diálogo y la visión compartida de la realidad que viven la empresa y, en particular, Chuquicamata, que se materializa en un instrumento colectivo que permitirá al equipo divisional contribuir a la generación de más excedentes y a construir un Chile mejor sobre la base de la seguridad y salud de las personas”, agregaron.

La división Chuquicamata produjo 268.348 toneladas de cobre durante 2022. Actualmente, atraviesa por un proceso de transformación de tajo abierto a subterráneo, uno de los llamados proyectos estructurales con que la firma busca contrarrestar la caída natural de las leyes minerales en sus depósitos.