Ayer, a las 22.07 horas, PwC informó a través de un hecho esencial a la Comisión para el Mercado Financiero, que las AFP Habitat, Capital, Cuprum y PlanVital, y la administradora de fondos Moneda, aceptaron la oferta formulada por la auditora para poner término definitivo a los litigios por el Caso La Polar.

Este miércoles la auditora comunicó que había llegado a acuerdo con ProVida.

Las negociaciones, que se extendieron desde octubre, fueron lideradas por Renzo Corona, socio principal de PwC, y Felipe Bulnes, el abogado designado para tal efecto por la auditora. Y abogados y ejecutivos en el caso de las AFP y Moneda.

La cifra acordada con cada administradora tiene dos componentes: el monto que pagará el seguro de responsabilidad profesional con que contaba PwC y que asciende a un total de US$39.156.713, y lo que desembolsarán los 37 socios de la auditora, que suma $21.500 millones. En este último caso, sólo nueve de los 37 socios estaban presentes al momento de destaparse el fraude por repactaciones unilaterales con un millón de clientes, en junio de 2011. Aquellos que lo eran en esa época y ya no están (como Luis Enrique Alamos, socio principal ese año), no tendrán que pagar nada, pues las reglas de PwC indican que los que se van no tienen responsabilidad en lo que ocurra tras su salida.

Los dineros para cada una

Las negociaciones comenzaron después de que, en septiembre del año pasado, la Corte Suprema falló a favor de las AFP Capital y ProVida, que solicitaron una indemnización de perjuicios a PwC, la auditora de La Polar al momento de destaparse el fraude. También fueron demandados exejecutivos de la cadena de retail y La Polar, lo que está pendiente.

PwC acordó pagar por las acciones y bonos de La Polar que tenían en sus portafolios al 31 de mayo de 2011 los siguientes montos: a AFP Capital US$2.560.849 y $1.406.100.000, a Cuprum US$ 11.112.675 y $6.101.700.000; a PlanVital US$959.339 y $526.750.000; a Habitat US$9.166.586 y $5.033.150.000 y a Moneda US$3.234.344 y $1.775.900.000. A ProVida, $14.870.341.768. Las cifras en dólares corresponden a lo que desembolsará el seguro de PwC; en pesos, las que pagarán los 37 socios de la auditora.

Capital y ProVida recibirán el dinero al contado, ya que ambas ganaron sus demandas en la Corte Suprema. Mientras, Cuprum, PlanVital, Habitat y Moneda obtendrán un 75% al contado y el resto en cuatro cuotas anuales.

Fuentes de la auditora aseguran que “nadie puede demandar, porque el caso está prescrito y los que podían hacerlo, ya lo hicieron”.

Estos montos representan menos de un tercio de lo solicitado en las demandas, “pero evidentemente PwC no tiene el patrimonio, ya que no posee terrenos ni bienes para liquidar; pedir su quiebra implicaba una recuperación (de dineros) cercana a cero”, asegura uno de los abogados negociadores. Para llegar a los montos acordados, cada AFP contó con estudios económicos, los balances y flujos de PwC, y se pagó en forma proporcional.

LEER MÁS
 

La escasez hídrica que afecta a gran parte de Chile y específicamente a zonas rurales del centro y centro sur de nuestro país, se ha convertido en un grave problema, al punto que muchas localidades rurales solo pueden abastecerse de agua través de camiones aljibes.

Un innovador proyecto que contempla una solución al delicado estado en que se encuentra, por ejemplo, la cuenca de Petorca y La Ligua, pero que también podría aplicarse a otras zonas del país es el que se encuentra desarrollando el Dr. Pedro Sariego, académico de Ingeniería Mecánica de la Universidad Técnica Federico Santa María, con interesantes resultados.

“La propuesta involucra herramientas tecnológicas que están en el mercado chileno, aplicando el conocimiento que está en el medio nacional, como la energía solar que es un tema del que se conoce bastante y en la que la USM ha sido pionera en el país”, indica el experto.

El académico explica que la iniciativa considera la instalación de una desaladora de agua de mar en la costa de esa zona, cuya energía provendría de una granja solar fotovoltaica en combinación con una central hidráulica de acumulación por bombeo (CHAB) para reducir el impacto en el medio ambiente, bajando sustantivamente los costos por metro cúbico del recurso y surtiendo durante todo el año del vital elemento a las localidades afectadas.

Los sistemas de impulsión de bombas, según Sariego, son sistemas clásicos de la ingeniería chilena desde hace mucho tiempo, también lo es ya la desalación por osmosis inversa. “Entonces lo que nos queda es implementar las centrales hidráulicas de acumulación por bombeo, sistema que los ingenieros mecánicos conocemos. Las tecnologías existen en el país y el tema pendiente es lo financiero, que puede ser abordado por los mecanismos de concesiones”, finaliza.

LEER MÁS