Pese a agrupar a las oficinas en Chile de algunas de las mayores empresas del mundo en sus respectivos rubros, su gremio no tiene sitio web. Y quien lo preside, no da entrevistas e incluso cuesta encontrar fotos suyas.

La Cámara de Empresas Chinas en Chile (CECC), que entre sus miembros cuenta con gigantes como el China Construction Bank, Bank of China, la empresa de trenes China Railway International Group y el gigante tecnológico Huawei, se lanzó oficialmente en abril del año pasado (evento al que asistieron el entonces ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, y el de Agricultura, Antonio Walker), y poco más se ha sabido de ella luego de la cita en el Hotel Intercontinental de Las Condes.

Pero que no se conozcan sus pasos públicamente, no es sinónimo de falta de trabajo, sino que responde a un tema cultural chino que privilegia el hermetismo empresarial, el que quizás habíamos olvidado tras el paso por nuestro país del opinante embajador Xu Bu.

Quien preside la CECC es el gerente general del China Construction Bank en Chile (CCB), Pu Zhang.

Pu fue escogido por sus pares y muchos lo consideran hoy el chino más poderoso en Chile, ya que encabeza a las multinacionales que quieren ser protagonistas de los esfuerzos de reactivación económica de la mano de inversiones en obras públicas, finanzas y adquisiciones en servicios públicos. Como la de la semana pasada: la compra de CGE en US$3 mil millones por parte de State Grid International, que integra la CECC a través de su ejecutivo Tang Jingfei, o Huawei, firma interesada en invertir en la red 5G, a través de su CEO en Chile, Yong Dou.

Según sus cercanos, el liderazgo del ejecutivo bancario dista mucho del extrovertido perfil gremial chileno.

En su discurso inaugural del año pasado, Pu Zhang fue breve y manifestó que la misión de la agrupación “es construir una plataforma, brindar servicios, fortalecer la colaboración y lograr éxitos”. Tras su alocución, volvió a su mesa para compartir con sus invitados, lejos de los micrófonos y del escenario.

“Conozco al señor Pu Zhang en sus dos facetas. Como gerente de CCB es una persona de gran capacidad e intachable. Y como presidente del gremio, tiene un gran liderazgo, pero es muy cauteloso, y esto es por un tema cultural. También tiene un liderazgo importante entre las empresas socias. Cuando se reúnen, conversan sobre sus desafíos y lo principal es la cooperación entre los dos países”, comenta Carlos Salazar Aros, ingeniero comercial chileno contratado por el gremio y cuya función es ser una suerte de relacionador público.

Un abogado que conoce a la CECC y a Pu coincide en que el bajo perfil obedece a una característica cultural. “No me sorprende que la CECC no tenga una página web. De hecho, los objetivos específicos del gremio no son muy claros. Para ojos occidentales, este método puede ser extraño, pero los chinos son reacios al marketing, están acostumbrados a manejarse de otro modo, y los negocios se manejan de manera más personal”, cuenta.

“Ellos no divulgan mucho, no tienen web y su misión es ayudar a que las empresas que lleguen a Chile se instalen de la mejor forma”, explica el director internacional de BDO, Mauricio Benítez. El abogado, que también estuvo presente en el lanzamiento de la CECC y que trabaja habitualmente con empresas chinas, explica que el rol de Pu es muy funcional a la organización.

“El rol de Pu Zhang es diferente a los liderazgos gremiales occidentales. A él le correspondió y asumió. Los liderazgos gremiales en China no son como acá, que se escoge a alguien por carisma. Para ellos es mucho más importante la estructura. Si están todos de acuerdo, él seguirá; si tiene que dejar la presidencia, también lo hará y llegará otro, y se mantendrá la misma línea”, sostiene el profesional.

Según conocedores de la operativa gremial, sus miembros no usan redes sociales y el contacto entre ellos se realiza usando la plataforma china WeChat, dado que Whatsapp no está permitido en el país asiático. Para su relacionamiento con la autoridad se apoyan en la figura de un coordinador, rol que ocupa Salazar. Él es quien genera las reuniones. Pu no aparece en escena. El líder empresarial sólo registra una cita en la plataforma de lobby con el jefe de Departamento de Mesa Internacional del Banco Central, Oscar Giusti, en marzo de este año, en tanto su colaborador chileno registra cerca de una decena de citas. Algunas de las más relevantes, según el portal Info Lobby, fueron con los subsecretarios de Energía y Economía, Francisco Javier López y Viviano Carrasco, respectivamente.

Salazar, quien relata que su acercamiento con China se inició cuando realizó un master en la Shangai University of Finance & Economics (SUFE), relata que Pu Zhang también le mandató gestionar reuniones con el MOP, con la Subsecretaría de Telecomunicaciones, entre otros servicios públicos.

“Esto obedece al interés por participar en obras hospitalarias, también en los proyectos de desaladoras. Otro foco es energía, y un proyecto muy analizado es la línea de transmisión HVDC Kimal-Lo Aguirre que se licita ahora. En telecomunicaciones, también les interesa la licitación de 5G”, enumera el coordinador gremial, que no pudo convencer a Pu de entregar su opinión a La Segunda, cosa que tampoco pudo hacer un abogado que trabaja directamente con él.

Un factor clave en la instalación del gremio en Chile es el apoyo del Consejo para la Promoción del Comercio Chino (CCPIT, por sus siglas en inglés). La entidad estatal de promoción de inversiones, una especie de Corfo china, se instaló en el país hace dos años y según cercanos a Pu Zhang, su presencia fue fundamental en el reconocimiento de la agrupación en ambos países.

El director del Centro de Estudios en Relaciones Internacionales de la UDD, Yun-Tso Lee, explica que la presencia en el Hotel Intercontinental de Li Jun, director mundial de CCPIT, habla de un espaldarazo de la administración del presidente Xi Jinping al gremio.

“Lo que busca la CECC son proyectos e inversiones, y poder competir en base a la información disponible”, relata el académico, quien además es cercano a algunos de los socios de la CECC. Sobre el hermetismo, dice que “esto se explica con un antiguo dicho chino que dice: para andar en pastizales hay que andar silencioso para no despertar a las víboras”.

En las dos administraciones de Sebastián Piñera, el empresario frutícola Luis Schmidt ha liderado la embajada chilena en China. Conoce a nuestros principales socios comerciales, sus estructuras de poder y cultura. Por eso, no le sorprende que cueste dar con el gremio.

-¿Por qué tanta reserva?

-Debemos entender que su cultura es muy diferente a la nuestra, ellos son muy reservados, yo le digo mentalidad confuciana. Ellos se mueven en sus círculos de confianza. Por ejemplo, para hacer negocios lo hacen con los miembros de su familia; si no pueden, lo hacen con los compañeros de colegio. El círculo de confianza lo llaman guanxi.

-¿Qué tan poderosas son las empresas del CECC?

-Las empresas que están en esta cámara realmente son de gran envergadura. El Banco de la Construcción, el Banco China y Huawei son muy grandes en busca de negocios grandes. En Chile hay otros gremios más pequeños (ver recuadro), pero la CECC no se mezclará con ellos.

-¿Y cuál es el objetivo de agremiarse, entonces?

-La idea es agruparse para traspasar datos, buscar nuevas posibilidades de negocios y establecer vínculos.