Es imposible quedarse en una burbuja y no darse cuenta lo que está pasando. Es un poco angustiante”.

La música ha ayudado a Francisco Acuña a pasar la cuarentena. El actor y comediante venía de un buen momento en su carrera, tras actuar por primera vez en una teleserie, además de participar en Morandé con Compañía. Pero todo “se congeló” tras la pandemia, así que Toto ahora usa el tiempo para estudiar teoría musical.

En su Instagram se le ha visto tocando guitarra distintos estilos, desde rock a música clásica. No solo lo ha ayudado para pasar el tiempo libre, sino que también para no angustiarse: “Es imposible ponerse en una burbuja y no darse cuenta lo que está pasando”.

Ha seguido actuando, enviando videos para Morandé con Compañía y preparando un show llamado “Los Kastos”, junto a su pareja Belén Mora. El show será transmitido por streaming el 24 de julio a las 21:30 horas (www.comediaticket.cl), en el que interpretarán a un hilarante matrimonio extremadamente conservador y desconectados con la realidad.

–¿Qué mostrarán en “Los Kastos”?

–Tenemos avanzado el show, ya está listo. El tema es que siempre se nos van ocurriendo nuevas cosas. Entonces es difícil estancarse y decir “vamos a hacer esto". Hace unos días estábamos conversando con la Belén, y ya, a lo que se supone que estaba listo, dijimos “y si hacemos esto, pongámosle esto otro”. Y ya mutó.

“Se retrocedió como 40 años”

–Venías de estar en una teleserie por primera vez, ¿Cómo afrontaste la pandemia?

–Tenía proyectos que hacer y todos se congelaron forzosamente. Con la teleserie, no pudimos hacer las últimas grabaciones, entonces se terminó de forma alternativa. Pero no me podría quejar tanto ni hacer un melodrama porque en todo Chile estamos igual. Soy uno más. Y con Morandé con Compañía hemos seguido trabajando desde la casa, mandando videos. Eso me ha tenido activo.

–¿Y la convivencia en tu hogar cómo ha sido?

–Hay parejas que a lo mejor el encierro les juega en contra por verse a cada rato, pero a nosotros no. Hemos trabajado mucho juntos con Belén, entonces siempre hemos estado en circunstancias estresantes. Entonces, esto igual como que nos ha tomado más relajado, de alguna forma. Porque si uno se pone a ver todos los problemas que hay, claro ahí empieza la angustia, el estrés. Es heavy, a mí me ha pasado algo súper extraño con lo que está pasando, porque siento que se retrocedió como 40 años. Es como volver a los 80. Ver imágenes de casas anegadas, ollas comunes. Y vienen muchas preguntas.

–¿Y qué haces para no angustiarte?

–Estoy estudiando música, ahora que tengo más tiempo, estoy tomando clases por internet. Entonces eso me ayudó un poco para desestresarme. Pero también, es imposible ponerse en una burbuja y no darse cuenta lo que está pasando. Es un poco angustiante. Y me da lata que todas las soluciones no dependen de uno. Es raro, porque también se junta con lo que pasó en octubre con el movimiento social. Nos ha tocado duro. No era tan cierto todo el castillo color de rosa. En realidad no.

“¿Y si esto no pasa?”

-La música ¿te ayuda a despejarte?

–Sí, mi instrumento es la guitarra. Y he estado estudiando de distintos estilos, de todo un poco, rock, jazz, música clásica. Es teoría musical, y es muy complicado. Es un mundo aparte sin acabar. Pero ahí voy aprendiendo.

–¿Planeas hacer algo más con la música o es solo un hobby?

–Siempre he estado ligado a la música, tengo una banda llamada “Dolores Capital”. Es un proyecto muy interesante que me gusta mucho. Es una música fresca, nueva, no es tan parecido a lo que suena siempre. Este año se supone le íbamos a dar con todo con la banda y pasa esto y quedamos congelados.

–¿Cómo te imaginas que vas a estar cuando la pandemia termine?

– Sabes que, es raro porque hay días que digo “ya, esto va a pasar, vamos a volver y vamos a estar bien”. Y otros días me levanto y me digo “chucha, y si esto no pasa, cuándo va a ser el día en que volvamos a no tener miedo de juntarse con la gente, no estar con la desconfianza de darle o no la mano”. Cuando superemos esto, siento que volveré de otra forma, disfrutando más lo que hago. Igual lo disfrutaba, pero no sé poh, a veces uno estaba tan metido en la máquina.

–¿En piloto automático?

–Claro, entonces ahora digo, “pucha, qué ganas de actuar en vivo, estar con la gente, pasarlo bien”. Disfrutar la pega, una junta con amigos. Porque es heavy, uno lo tuvo tanto, y es tan del ser humano, que cuando tienes algo todos los días, empiezas a perder el valor a las cosas. Y cuando no lo tienes, dices “chuta que era importante”. Es como el agua, uno se olvida lo importante que es, y cuando se corta el agua no sabes qué hacer. Ojalá que aprendamos y valoremos lo que tenemos.

LEER MÁS
 
Más Información