Más detalles sobre su delicada situación económica entregó la empresa de casinos de juegos Enjoy al 8° Juzgado Civil de Santiago para avanzar en la reorganización judicial que solicitó y en la que busca negociar un aplazamiento de sus obligaciones financieras, lo que podría involucrar a miles de inversionistas e instituciones financieras chilenas y extranjeras.

En la lista de acreedores de la compañía, que en total suma pasivos por unos US$492 millones, se observan dos tipos de fiadores. Por un lado están los miles de tenedores de bonos (con o sin garantías), donde los pasivos alcanzan unos US$374 millones. En la otra vereda están un grupo de 5 bancos y 17 corredoras y administradoras de fondos, donde las últimas no cuentan con ninguna garantía.

Entre los acreedores bancarios, la lista la encabeza el Santander con 5 créditos por unos US$10 millones, seguido por BCI con dos créditos por US$4,7 millones, Banco Consorcio con dos préstamos por US$3 millones, BancoEstado con US$3,5 millones y Banco Itaú con US$2,3 millones.

El listado de acreedores corredoras y administradoras de fondos está liderado por Fondo Mutuo Principal a través de tres fondos, que acumula unos US$9,3 millones en efectos de comercio de Enjoy, le sigue los documentos acumulados en custodia para sus clientes por Tanner Corredores de Bolsa con unos US$9,2 millones y que no implican exposición para Tanner.

La menor de todas las listas de deudas es la con proveedores, donde según la auditoría de Enjoy figuran solo siete empresas (con acreencias por apenas $105 millones), donde la mayor es Larraín Vial Servicios Profesionales con casi $57 millones y Credicorp Capital con $20 millones.

Las ventas presenciales del comercio minorista en la Región Metropolitana registraron en marzo una importante caída de 19,9% real, cerrando el primer trimestre con una disminución de 8,0% real, dijo la Cámara Nacional de Comercio (CNC).

En el tercer mes del año, solo la línea tradicional de supermercados creció, permitiendo que la caída total del comercio no fuera aún más pronunciada. A principios de marzo los supermercados “experimentaron un aumento en la demanda ante el temor del retorno de los actos de violencia”, dijo la CNC. En la segunda quincena de marzo, la crisis sanitaria desató otro fuerte incremento en las ventas de supermercados, ante posibles desabastecimientos o cierres. Así, en el último trimestre móvil se observó un quiebre en la tendencia positiva que venía desde diciembre, tras la fuerte baja septiembre-noviembre por la crisis social.

Pareciera que el trabajo virtual cansa más, conectados a una pantalla una reunión tras otra…

La contingencia ha acelerado la tendencia de trabajar virtualmente que venía impulsando la transformación digital. Ineficiencias de lo presencial pesan más en lo virtual. Se pierde tiempo en que todos se conecten, chequeen audio, entender para qué es esta reunión y evitar mantengan el foco a través de la pantalla. Algunos tips para reuniones virtuales efectivas:

1. Establecer metas más acotadas y concretas. Pensar el trabajo como piezas de Lego. Focos para el día y con acuerdos del entregable en concreto. Mejor entregables parciales más concisos. Ello facilita medir desempeño y da sensación de avance. También permite corregir más rápido.

2. No todo amerita reunirse. Vale más repartirse qué pieza de Lego trabaja cada uno por separado. Luego vendrá el tiempo para co construir.

3. Conectar a las personas con el foco de la reunión. No es solo estar en la pantalla sino también “enchufados” con el tema, lo que requiere que haya claridad sobre el objetivo de la reunión. Invitación debe tener un título explícito, incluir un punteo de los tópicos a tratar o enviar una pregunta previa para pensar sobre el tema. Iniciar respondiendo, ¿cuál es el propósito de esta reunión, con qué entregable nos queremos ir?

4. Sincronizar los tiempos. Acordar la mejor hora para todos. La duración ideal, que no supere los 30 a 45 minutos.

Estamos aprendiendo. Es posible que otros también estén incómodos. Atrévete a proponer algo distinto, seguramente te lo agradecerán.

Tras llevar a cabo una reestructuración en su inmobiliaria, que implicó la salida de la gerencia general de Álvaro Valenzuela y la designación en el cargo de Richard Kouyoumdjian (gerente general de Empresas Indumotora) en marzo pasado, la familia Avayú se apresta a impulsar su negocio inmobiliario.

Todo dentro del plan de los Avayú de reorientar parte sus inversiones tras vender en US$289 millones parte de Indumotora automóviles (aunque mantienen la representación de Kia en Chile).

El primer proyecto de la carpeta será en Ñuñoa, tras ingresar a evaluación ambiental un plan por algo más de US$30 millones para levantar un edificio de 22 pisos, 501 departamentos y cuatro locales comerciales en Av. Vicuña Mackenna 1130, casi esquina Irarrázaval. Obra que la familia contempla iniciar a contar de abril del próximo año.