Los llamados “guetos verticales” de Estación Central volvieron a hacer noticia la semana pasada, cuando la Séptima Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago desestimó el reclamo de una decena de inmobiliarias que apelaban a la decisión de la Contraloría de invalidarles distintos permisos de construcción en esa comuna.

¿El argumento? El mismo que ya había tenido la Contraloría en 2018 y el Tribunal Constitucional el año pasado: estos permisos contravienen una circular del Ministerio de Vivienda y Urbanismo que impide la “edificación continua” en zonas que no tienen límites de altura. Esto significa —según el fallo—, que estos permisos son ilegales, lo que pone a las empresas entre la espada y la pared en cuanto al futuro de sus iniciativas, que se encuentran en distintas etapas de avance.

Aunque es previsible que las inmobiliarias apelen a este fallo ante la Corte Suprema, las distintas agrupaciones sociales y juntas de vecinos de Estación Central unidas en este caso, ya lo sienten como un triunfo. Los responsables detrás de ese sentimiento son los hermanos Gabriel (36) y Cristóbal Osorio (34), ambos abogados. El mayor estudió derecho en la Universidad Central y el menor en la Universidad de Chile, y trabajan juntos desde 2018 cuando crearon el Estudio Osorio Vargas & Abogados.

Cristóbal cuenta que el origen de esta representación partió hace dos años. “Diversas agrupaciones sociales y juntas de vecinos nos pidieron ayuda porque llevaban años luchando contra estas edificaciones sin obtener resultados”, cuenta. Agrega que era un caso que otros litigantes lo veían prácticamente como perdido, pero ellos decidieron tomarlo, y de manera voluntaria (pro bono) por representar “una causa con interés público y social”.

Sobre el futuro del caso, Cristóbal explica que hay muchas puertas abiertas dependiendo lo que ocurra en la Suprema. Prefiere no hablar de demoliciones por ahora, en el caso de que el tribunal les de la razón. Sí dice que hay obras que podrían detenerse por completo, otras podrían ser reformuladas, incluso se podrían evaluar nuevas demandas de no triunfar: contra el Estado o contra el municipio, por ejemplo, por daños ambientales.

¿Cómo es que dos hermanos llegan a ser abogados y socios? Por el padre, según reconocen ambos. Ninguno quería estudiar derecho —de hecho Gabriel tenía marcada afición por la música—, pero a ambos el papá les recomendó la profesión y disciplinadamente le hicieron caso.

Como característica en común, ambos son muy activos usuarios de las redes sociales. No es difícil toparse en Twitter con sus comentarios frente a resoluciones judiciales favorables o leer discusiones con otros abogados o figuras políticas.

Los hermanos Osorio no son desconocidos en el ambiente legal y, menos en el mundo político. Ambos participaron en el segundo gobierno de Michelle Bachelet y militan en el Partido Socialista (PS), con reconocida cercanía a su actual presidente Álvaro Elizalde.

Gabriel fue asesor de la División Jurídico Legislativa de la Segpres entre los años 2015 y 2018. Ese mismo rol desempeñó en el Ministerio del Interior, durante el primer año del segundo mandato de Bachelet. Cristóbal, en tanto, ejerció como Jefe de la Unidad de Asesoría Jurídica y Legislativa de la Segegob durante 2014 y 2015; y antes lideró la Unidad de Instrucción de Procedimientos Sancionatorios de la Superintendencia del Medio Ambiente.

Gabriel es el más activo políticamente. De hecho, fue uno de los que intervino en la Comisión Técnica por una Nueva Constitución en representación del PS.

Entre los casos políticos que han estado involucrados está el fallo que evitó la remoción del fiscal Emiliano Arias en el Pleno de la Corte Suprema; hicieron la presentación a la Contraloría para evitar el nombramiento del hermano del presidente Sebastián Piñera (Pablo) como embajador en Argentina; y del cuestionamiento ante el mismo organismo del viaje que realizó el exministro de Hacienda, Felipe Larraín, a un seminario de la Universidad de Harvard.

La negociación colectiva que se llevó adelante entre Latam Airlines y su Sindicato de Tripulantes de Cabina de Lan Express y Transporte Aéreo en 2018 tuvo la semana pasada un nuevo hito, en el que también estuvieron involucrados los hermanos Osorio.

Pese a que la Dirección del Trabajo y los tribunales le dieron la razón a la compañía, el Tribunal Constitucional finalmente se pronunció en favor del sindicato, en cuanto a que la última oferta que entregó la empresa era válida para aquellos trabajadores que siguieron con la huelga en abril de 2018, pero luego decidieron aceptarla. La ex Directora del Trabajo Patricia Silva asesoró a los sindicatos y fue quien les encargó a los hermano Osorio la arista constitucional.

“Con esto queda firme la posibilidad de que un sindicato pueda asilarse en la última oferta para dar por terminada una huelga, dado que así lo ha señalado la jurisprudencia de la Corte de Apelaciones”, dijo Gabriel Osorio al Diario Financiero el martes pasado.