A nivel mundial ya se habla de la Cuarta Revolución Industrial, basada especialmente en la digitalización, que está abarcando prácticamente todos los ámbitos de la vida. En esa línea, se ha acuñado el concepto de Industria 4.0 para referirse a las fábricas inteligentes, en las que convergen tres componentes que deben funcionar en forma armónica y virtuosa: la parte mecánica, la de sensores con su tratamiento electrónico, y un programa computacional que optimiza su funcionamiento. En términos simples, este desarrollo conjunto se conoce como Mecatrónica.

Pensando en la urgencia que tiene Chile de diversificar la economía mediante innovación y emprendimiento, la Universidad de Santiago de Chile (Usach) abrió la carrera de Ingeniería Civil Mecatrónica, que este año recibe a su primera generación de alumnos.

El académico del Departamento de Ingeniería Mecánica de la Facultad de Ingeniería de la Usach Dr. Edmundo Sepúlveda, quien encabezó el comité técnico para la creación de la carrera, explica que “con el advenimiento cada vez más potente de los productos o sistemas inteligentes, en nuestro país se requerirán profesionales que puedan dominar en forma conjunta las áreas de mecánica, electricidad e informática”.

Quienes cursen Ingeniería Civil Mecatrónica deben ser hábiles en el uso de aplicaciones computacionales; tener buen rendimiento en matemática y física; interés en desarrollar soluciones innovadoras para problemas cotidianos y de relevancia para el país, así como por aprender nuevas tecnologías para aplicarlas al desarrollo de productos inteligentes.

Los futuros profesionales de esta carrera, explica el Dr. Sepúlveda, estarán capacitados para liderar o integrar equipos de trabajo en empresas públicas o privadas que desarrollen y apliquen sistemas productivos industriales, generando productos o servicios, usando la tecnología moderna digital disponible en las áreas del conocimiento de la mecánica, la electrónica y la informática.

“Su labor puede incorporarse productivamente en empresas manufactureras, de logística de materiales y productos, minería, agricultura de precisión, uso de energías convencionales o naturales, con aplicaciones automáticas y robóticas”, afirma.

Las proyecciones de empleabilidad de los futuros ingenieros civiles mecatrónicos son mayores al 90%, lo que corresponde —explica el Dr. Sepúlveda— “a las tasas normales para estas carreras con el prestigio de la Usach”.

Para crear la carrera, el Departamento de Estudios de la Dirección de Desarrollo Institucional de la Usach realizó un “Estudio de pertinencia y empleabilidad de Ingeniería Civil Mecatrónica”, con el objetivo de recoger y sistematizar evidencia para evaluar la decisión. Para ello encuestaron a decenas de actores clave (empresas) y conversaron con dos expertos de grandes compañías asociadas al rubro.

Ese estudio mostró que el desarrollo de sistemas mecatrónicos —que actualmente se realiza en el extranjero— puede ser una necesidad creciente en el país en cinco o seis años, especialmente en el desarrollo y creación de nuevos productos, y puede ser un área futura importante en la minería.

Una de las conclusiones del estudio es, señala el Dr. Sepúlveda, que “se avizora un amplio campo de empleabilidad para los ingenieros civiles mecatrónicos con el sello de la Usach en las áreas que se han identificado para el desarrollo de las competencias laborales de la carrera”.