Mientras la Fiscalía Metropolitana Occidente lleva la investigación por el megaincendio ocurrido ayer en el centro Puerto Madero de Bodegas San Francisco (BSF) en la comuna de Pudahuel, que costó la vida a cuatro personas (ver recuadro), la empresa realiza sus propias indagaciones para conocer los motivos de la explosión que desató la tragedia.

Hasta ahora, la empresa solo entregó un breve comunicado agradeciendo a Bomberos de Santiago, a Carabineros de Chile y la Policía de Investigaciones por su labor en la zona. Tras ser contactada por La Segunda, la firma mantuvo silencio sobre las causas o la afectación provocada por el incendio que surgió en una bodega arrendada por la empresa de tronaduras Explonun, filial de la Empresa Nacional de Explosivos (Enaex), perteneciente al grupo Sigdo Koppers. Allí se habrían almacenado compuestos químicos como nitrato de sodio, aluminio y óxido de fierro, elementos precursores de explosivos usados principalmente en la minería.

Alberto Fluxá es el gerente general de Bodegas San Francisco. El ingeniero forestal de la Universidad de Chile es un histórico de la empresa de bodegaje más grande del país que cuenta con cerca del 45% del mercado. Si bien los ingresos de la empresa no son públicos (pues no es una sociedad anónima abierta), en una entrevista al Portal Negocios Globales Logística, el máximo ejecutivo de la empresa reconoció una facturación mensual cercana a las 200.000 UF, unos US$7 millones.

Fluxá, quien en la misma entrevista se describió como un “director de orquesta”, asumió el cargo el 11 de diciembre de 2018 tras ocupar la gerencia de desarrollo de San Francisco en julio de 1999. Reemplazó como gerente general a uno de los fundadores y dueños de empresa: Sergio Barros, quien comparte participación accionaria con Arturo Salvatierra y la familia Silberberg.

El negocio comenzó en 1980, cuando los socios compraron un terreno de 7 mil metros cuadrados en la esquina de San Francisco con Ñuble. Ahora la firma tiene 1,6 millones de m2 de bodegas construidas, un banco de terrenos para expandirse en los próximos 15 años (cerca de 340 hectáreas) y un plan de expansión por cerca de US$15 millones, donde esperan construir 100 mil metros cuadrados de nuevas bodegas para acompañar la expansión de sus clientes y la mayor actividad ligada al comercio electrónico.

Barros y Salvatierra eran ejecutivos de una empresa constructora en los 80. “Allí surgió la posibilidad de hacer un grupo de bodegas para venderlas”, comentó Barros a La Tercera en 2015. Pero con la crisis del 82, el proyecto quedó inconcluso.

Luego del traspié, reclutaron a Federico Silberberg quien inyectó más recursos a la sociedad. Las bodegas no se pudieron vender, y el grupo de tres emprendedores optó por arrendarlas, fórmula que utilizan hasta hoy.

En un viaje a Miami, Barros, Silberberg y Salvatierra, se percataron de que el negocio de rentar bodegas podría resultar promisorio. Revisaron la guía telefónica y constataron que en las páginas de servicios había 15 páginas con distintos actores ofreciendo arrendar bodegas, mientras que en Chile la oferta era mucho más acotada.

Solo hicieron un cambio al modelo estadounidense, ya que en Miami, los centros de almacenamiento son abiertos y BSF se enfocó en un modelo de “condominio de recinto cerrado”, apuntan en la empresa que actualmente opera en Antofagasta, Chillán, Temuco y Puerto Montt, y que tiene tres unidades en Lima.

La llegada a Perú se gestó en 2009. Barros, Silberberg y Salvatierra conversaron con Eduardo Elberg, ex dueño de los Supermercados Santa Isabel. El empresario los convenció de iniciar la internacionalización de BSF. Elberg conocía bien las inversiones inmobiliarias en Perú y se asoció al desembarque en Perú como socio mediante su sociedad Algeciras. Allí aprovecharon la presencia de algunos de sus clientes como Cencosud. En total, la inversión en ese país supera los US$200 millones con los centros de Villa El Salvador, Portada de Lurín y Portada de Lurín Sur.

La cinta del primer centro de distribución peruano fue cortada en marzo de 2011 por el fallecido ex presidente de Perú, Alan García, quien valoró el desembarco de los empresarios chilenos.

“No hay muchas dudas de que éste (incendio) tuvo su origen en la manipulación de elementos altamente riesgosos para la población, y por ende las primeras líneas investigativas dicen relación con el cuasidelito de homicidio”, dijo esta mañana el fiscal Metropolitano Occidente, Luis Rodríguez, en T13 Radio. Explicó que en la investigación se podrá establecer si hay algún delito más grave. Por eso no descartó la hipótesis de la intencionalidad. “No hay que descartarla, porque si podemos establecer que hay una persona o más relacionadas con las empresas involucradas que sabían o debían saber de la manipulación de elementos altamente riesgosos, evidentemente podríamos imputarle intencionalidad”, acotó.

Rodríguez se entrevistó ayer con ejecutivos de Bodegas San Francisco, quienes le entregaron información sobre las instalaciones incendiadas. Explonun, la filial de Enaex donde habría partido el incendio que dejó cuatro fallecidos, arrienda al menos tres bodegas allí. “Hay diligencias pendientes en orden a recabar mayor información respecto al vínculo entre ambas empresas”, lo que permitiría “verificar quiénes son las personas que debían estar al tanto de la existencia, almacenaje y manipulación de productos altamente riesgosos”.