Innovación y emprendimiento, palabras clave en la formación de los ingenieros que el país requiere para alcanzar su desarrollo. La Facultad de Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso detectó la necesidad de promover el desarrollo de estas capacidades en los estudiantes, lo que significó la realización de exitosas actividades de fomento al emprendimiento y, posteriormente, en 2018, la creación de la preincubadora The Lift. ¿Cuál es su rol, estrategia y desafíos?

Katherine Westerhout, coordinadora de The Lift PUCV, recalca el rol de motivar y acercar el mundo del emprendimiento e innovación a los estudiantes: “Preparamos a los estudiantes con proyectos desde una etapa muy inicial para que sean capaces de dar forma a sus ideas y convertirlas en emprendimientos reales. Por último, crear comunidad y generar redes de contacto, tanto internas como externas. The Lift busca impulsar, desarrollar y potenciar ideas de emprendimiento de alto impacto nacidas de nuestros estudiantes de Ingeniería, que utilicen la tecnología como herramienta de desarrollo”.

Los servicios de The Lift se centran en —explica— “formación en innovación y emprendimiento, la cual se entrega en formato de mentorías personalizadas. Se apoya la idea o proyecto de emprendimiento de cada estudiante. También desarrollamos actividades de fomento al emprendimiento, como charlas, talleres, speed mentoring, y la más importante, nuestro Lift me Up, que es el torneo de emprendimiento para quienes tengan ideas innovadoras con alto potencial del desarrollo”.

Un caso de éxito es el de Elías Aguilera, quien lidera un equipo interdisciplinario que busca generar energía eléctrica a partir de lomos de toro y que ganó la primera versión del torneo Lift me Up con “Blitz Road”, y que además ha logrado levantar fondos en dos concursos diferentes.

Otro proyecto exitoso, ganador de la tercera versión del mismo torneo en su versión internacional y que se adjudicó un fondo Piensa y Crea, es “Shoesing.cl”, de Rodrigo Vilches, estudiante de Ingeniería Civil Informática, quien formalizó su empresa que consiste en una plataforma comparadora de precios de calzado femenino que utiliza inteligencia artificial.

Hay equipos que siguen trabajando, desarrollando prototipos y postulando a fondos concursables, como el de Karina Moreno, también ganadora del Lift me Up internacional, quien desarrolló un biodigestor a pequeña escala para cocinas de restaurantes que busca reducir el número de residuos orgánicos que generan. Como premio de este torneo internacional, ambos obtuvieron una pasantía de un mes en el centro de emprendimiento Conrad de la Universidad de Waterloo, en Canadá.

The Lift es una de las áreas que componen un proyecto mayor denominado Ingeniería 2030, cuyo cofinanciamiento entregado por Corfo potencia el eje Investigación y Desarrollo, Innovación y Emprendimiento (I+D+i+e).

El director del Proyecto Ingeniería 2030 de la Facultad de Ingeniería PUCV, Rodrigo Alfaro, precisa que “actualmente se encuentra en desarrollo la segunda etapa, que plantea desafíos en torno a la eficiencia en la formación de los ingenieros. Existen iniciativas orientadas a fortalecer el desarrollo temprano de habilidades y utilización de herramientas para el emprendimiento. Creemos que estamos aportando a la formación de ingenieros con habilidades transversales”.

Finalmente, Katherine Westerthout complementa que “en el marco de Ingeniería 2030, buscamos que nuestros emprendedores sean capaces de desarrollar una visión crítica para identificar oportunidades de mejora en todo ámbito: social, económico y ambiental, y que logre empatizar con problemas que afectan a sectores importantes de la población para ofrecer soluciones reales y efectivas”.