Cincuenta y un años tiene el Club de Rayuela El Lobito y sigue operando en la misma dirección que el día en que nació: en Nueva de Matte 2585, Independencia. Como antiguamente esta zona pertenecía a Conchalí, desde el día de su fundación, el 26 de marzo de 1968, son parte de la asociación de esta comuna. “Según cuenta la historia, esto se formó cuando dos amigos, uno de apellido Lobo, fanáticos de la rayuela, decidieron armar un club”, cuenta Ricardo Soto (60, de pie a la derecha en la foto superior), actual presidente.

En un gran salón, detrás del restaurante que lleva el mismo nombre que el club —donde se sirven colaciones, almuerzos y platos típicos—, está la cancha donde practican y se enfrentan los cerca de 40 miembros de El Lobito. “Esto es una quinta de recreo y el dueño de este espacio, uno de los miembros originarios del club —Héctor Farías, sentado en la foto superior— es quien atiende a los comensales todos los días. Es él también quien maneja la cancha y además sigue compitiendo con nosotros”, cuenta Ricardo.

Los jugadores de El Lobito se enfrentan a los otros 13 clubes que participan en los campeonatos de esta zona. Muchos viajan desde lugares como Pomaire, Lampa o Melipilla, mientras otros viven a pocas cuadras. Luis Johnson (65), Iván Fuenzalida (57) y Miguel Millaqueo (49) son algunos de ellos. Con sus tejos listos, mañana esperan ganar la fecha del campeonato de clausura, que juegan como locales frente a Monterrey. Todos llevan décadas perfeccionando sus tiros, y aunque nunca han sido campeones, llevan orgullosos su chaleco azul con letras rojas. “Lo que amo de este deporte es el buen ambiente. Muchos piensan que esto es un grupo de viejos borrachos, pero no. Es gente buena. Aquí sólo queremos compartir entre amigos y pasarlo bien”.

LEER MÁS
 
Más Información