Con cerca de 130 locales con funcionamiento irregular según su sindicato, hoy partió la primera jornada de huelga de Walmart, la más grande en la historia del retail según sus protagonistas. Uno de los principales temas de fricción que se tomaron la negociación entre el Sindicato Interempresas Lider (SIL) y la empresa es la multifuncionalidad que está le pide a sus trabajadores.

¿Cómo solucionar estas diferencias? Según el ex subsecretario del Trabajo del primer gobierno de Sebastián Piñera, Marcelo Soto, una de las principales formas de solucionar este problema es que las empresas entreguen a sus trabajadores capacitaciones para prepararse para el futuro.

“Las empresas, al optar por modelos de automatización, pueden solucionar sus conflictos con capacitación, donde también ganan los trabajadores y se transforman en elementos más adaptable a los cambios”, dice el también socio de UHC Abogados.

Concuerda con este punto el abogado laboralista José Tomás Peralta, quien además agrega que la reconversión que debe entregar la empresa debe ser inteligente. “Si la empresa va a reconvertir a sus trabajadores, tiene que ser para trabajos que sigan la lógica de los cambios tecnológicos. No puede ser cualquier cosa. Si todos los cajeros serán máquinas, que los capaciten para ser técnicos de esas máquinas”, dice. Peralta a trabajado con sindicatos de la banca y retail.

Pero no basta con capacitación señala el abogado laboralista Cristián Aguayo, que ha representado en negociaciones colectivas a empresas como ABB o al Conservador de Bienes Raíces.

“Siempre estos procesos dependen de factores económicos. Para las empresas son costos y para los trabajadores, beneficios económicos”, dice.

Este es justamente uno de los puntos de fricción más importantes en la negociación de Walmart. El sindicato pide un bono de fin de conflicto de $760 mil, pero la empresa ofrece solo $730 mil. Además, los trabajadores exigen un aumento de sueldo de 4% por pasar a ser multifunción, pero la empresa propone 2%.

“El bono de término de conflicto aquí es determinante. La empresa tendrá que ver si le conviene pagar esa diferencia o resistir esta huelga, con todo el daño que puede tener en su relación con los clientes”, dice Aguayo.

Una de las cosas que está haciendo la empresa en para resistir, y que comunicó hoy en la mañana, es utilizar sus servicios de comercio electrónico, como el retiro en tienda. “Para los clientes que compren en Lider.cl y elijan el servicio pick up en supermercados Lider afectados, podrán optar a un servicio gratuito de despacho a sus casas”, dijo Walmart en una declaración.

Eso sí, son 6 locales de Lider a nivel nacional y otros 14 de Lider Express en la Región Metropolitana que verán comprometida su operación, y el SIL ha dicho que no permitirá el ingreso de shoppers de la aplicación Cornershop a los locales cerrados.

En la Casa Central de la UC se lanzó el estudio “Mercado Laboral Chileno para la Cuarta Revolución Industrial”, escrito por Juan Bravo, Agustín García y Hans Schlechter, en el que, siguiendo metodologías de estudios realizados para otros países y con los datos para Chile de competencias que genera la OCDE y los resultados de la encuesta Casen, calculan la probabilidad de automatización de los empleos en nuestro país, el que alcanza en promedio el 42%. El estudio explica además que el 17% de los trabajadores nacionales (uno de cada seis aproximadamente) están en puestos con “un alto riesgo” de automatización.

Entre las características de los trabajadores más vulnerables, el análisis de Clapes UC indica que están las personas de baja calificación, de niveles socioeconómicos medios y están igualmente distribuidos a nivel de edad (con excepción del tramo de 25 a 34 años, que enfrentan un riesgo menor). Las áreas económicas más susceptibles de perder puestos de trabajo están relacionadas no únicamente con labores rutinarias, sino con todas aquellas que puedan ser codificables para poder ser realizadas por máquinas. Entre ellas, para el caso chileno, las más riesgosas serían las asociadas a la agricultura y ganadería, transportes, almacenamiento y comunicaciones.

Para enfrentar esta situación, los autores reconocen la necesidad de adaptar el sistema de capacitación de trabajadores, tal como lo han reconocido comisiones de expertos en el pasado. En ese sentido, valoran el proyecto de ley que modifica el Sence, aunque consideran que ese esfuerzo debe ser complementado con la creación de un marco nacional de cualificaciones que coordine al sector público y privado.