Grecia tiene una población aproximada de 11 millones de habitantes. Cuatro millones de ellos viven en Atenas y sus alrededores, lo que la convierte en la ciudad más poblada del país. Con más de tres mil años de historia, se impone como el centro de la vida económica, cultural y política de la zona.

Las visitas de turistas internacionales han aumentado exponencialmente durante los últimos años, lo que ha provocado que los locales estén acostumbrados a cruzarse en las calles con extranjeros provenientes de todas partes del mundo. Para quienes se encuentren de visita en la ciudad, comunicarse con ellos será fácil; la mayoría domina muy bien el inglés.

El desplazamiento por la urbe también será un tema resuelto, ya que si bien Atenas es una ciudad extensa, las principales atracciones se encuentran relativamente cerca unas de otras, lo que hace que uno se pueda mover a pie con facilidad. De hecho, si se quisiera, en un día se podría dar una mirada general a la acrópolis junto con las principales atracciones del centro de Atenas, caminando. Hay una amplia oferta de transporte público; taxis, buses, trolebús, metro y trenes disponibles para quienes prefieran esta alternativa. Trasladarse desde el aeropuerto también es fácil; en el mismo terminal aéreo hay una parada de bus que, por 6 euros, en alrededor de una hora llega a la zona central de Atenas, ubicada en la Plaza Syntagma.

Llama la atención la gran cantidad de motos que circulan por las calles. Hay que tener especial cuidado cuando se transita por ellas, dado que los conductores, tanto de motos como de autos particulares y buses, no consideran los pasos de peatones como un lugar en el que se deba ceder el paso; ellos simplemente siguen su ruta sin parar.

Atenas tiene precios bastante asequibles si se le compara con el resto de Europa. De hecho, en varios blogs de viajes está considerada como una de las 10 ciudades más baratas del continente. Una mousakka —plato típico parecido a una lasaña de berenjenas con carne picada— cuesta alrededor de 9 euros, mientras que una habitación doble en un hotel de tres estrellas ubicado cerca del centro, alcanza los 50 euros.

Para esta urbe, cuna de la democracia, se deberían dedicar entre dos y tres días, como mínimo. En el caso de que se cuente con menos tiempo, se puede tomar un tour en los buses de dos pisos, llamados Hop on-Hop off, los que recorren las principales atracciones en un día. Lugares recomendados:

lAcrópolis: es el lugar más importante de la antigua Grecia y actualmente uno de los monumentos más visitados del mundo. En esta meseta se encuentran los monumentos más reconocidos de esa época: la puerta de los Propileos, el Partenón, el templo de Atenea Niké, el templo Erecteion y los teatros de Herodes Ático y de Dionisos.

l Plaza Syntagma: es el centro geográfico de la capital. En el lugar se encuentra el Parlamento Griego, en donde se desarrolla uno de los símbolos más emblemáticos de Atenas: el cambio de guardia, que se celebra cada hora durante todo el día. Es todo un espectáculo ver la vestimenta de la Guardia Presidencial, voluntarios del ejército que vigilan la tumba del Soldado Anónimo, un monumento que conmemora a los soldados griegos muertos en diferentes guerras a lo largo de su historia.

l Templo de Zeus Olímpico: está ubicado a unos 500 metros por el sur de la Acrópolis. El templo comenzó a construirse en el siglo VI a.C., pero no fue terminado hasta 600 años después. Hoy se pueden ver en pie 15 de las 104 columnas que existían en el momento de su construcción, y que tienen casi 18 metros de alto. En esta parte de Atenas también se puede ver el Arco de Adriano, que fue hecho en el año 131 d.C. y que es una puerta de entrada que construyeron los atenienses en honor a este emperador.

l Estadio Panatenaico y Jardín Nacional de Atenas: El Panatenaico es un estadio de atletismo en el que se realizó la primera edición de los Juegos Olímpicos modernos, en 1896. Reconstruido a partir de los restos de un antiguo estadio griego, está hecho enteramente de mármol blanco. Frente a él está el Jardín Nacional, un parque público de 15,5 hectáreas en pleno centro de la capital griega.

l Ágora Romana: es la antigua plaza pública de Atenas, uno de los principales lugares de reunión de la ciudad, en el que se situaba el mercado central.

l Barrio de Monastiraki: uno de los barrios más turísticos de Atenas. Las calles adyacentes están llenas de restaurantes tradicionales, muchos de ellos con vistas a la Acrópolis. Es una plaza peatonal conectada a la calle Ermou, una arteria también peatonal que es además la mayor calle comercial de Atenas y que nace en la plaza de Syntagma.

l Barrio La Plaka: Junto con el barrio de Monastiraki, reúnen una gran actividad comercial y son las zonas pobladas más antiguas de la ciudad. En sus estrechas calles adoquinadas se pueden encontrar pequeños comercios que ofrecen joyas, ropa y cerámicas, además de tiendas de souvenirs.

l Colina de Licabeto: es una pequeña montaña de 278 metros de altura desde donde se obtienen las mejores vistas de Atenas. Se encuentra situada en el barrio Kolonaki, uno de los más elegantes de la ciudad, en el que se pueden encontrar varios restaurantes chic y tiendas de conocidas marcas internacionales de lujo.

l Barrio de Psiri: es una de las zonas favoritas de los atenienses para tomar un trago. Tiene mucha vida de noche este pequeño barrio de bares y terrazas abierto a las expresiones artísticas, ya que varias de sus calles están pintadas con grafitis y dibujos de colores. Suele estar repleto de gente joven y se entrecruzan distintas lenguas; se puede escuchar a personas hablando en griego, además de extranjeros solicitando un vaso de Ouzo, trago típico de la zona con gusto a anís.

l Museo Arqueológico Nacional y Museo de la Acrópolis: el Museo Arqueológico Nacional de Atenas tiene la mayor parte de los tesoros arqueológicos procedentes de Grecia, y es una de las principales referencias mundiales en el ámbito de la arqueología. El Museo de la Acrópolis, en tanto, conserva esculturas y piezas de los edificios de la acrópolis.

l Puerto del Pireo: ubicado al sur de Atenas, es el puerto más grande de Grecia. Es la entrada y salida constante de cruceros internacionales y barcos locales que unen el territorio continental con sus islas. Hay variedad de restaurantes especializados en pescados y mariscos, además de bares y cafeterías.

Una parada ideal del viaje es Santorini. Esta isla, ubicada al sur del mar Egeo y una de las más famosas de Grecia, destaca por las hermosas vistas que ofrece. El viaje desde Atenas a la isla se puede realizar en avión, con una duración de alrededor de 50 minutos, o en ferry, el que puede demorar entre cuatro y ocho horas, dependiendo del barco que se tome.

Oía está en el extremo norte de la isla. Es el pueblo más pintoresco, lleno de pequeños callejones con iglesias, tiendas y galerías de arte. Conocido por ser la típica postal de Santorini, en la que se exponen sus casas de color blanco con techo azul. Ofrece las mejores vistas de la isla y es una parada obligada para deslumbrarse con las puestas de sol.

Thira (Fira) es la capital de Santorini. Es un buen lugar para encontrar alojamiento económico y bien situado. Está al borde de un acantilado, por lo que ofrece vistas muy lindas del mar. En Thira se puede pasear por el puerto, recorrer las calles del centro, en las que se encuentra una variada oferta de restaurantes y bares, además de tiendas en las que se pueden comprar productos artesanales.

En Santorini puedes ir de excursión al volcán de Nea Kameni. En 3 horas se puede hacer un paseo a bordo de una goleta tradicional desde el puerto antiguo de Thira, con detención en el volcán para caminar por sus senderos, y finaliza con un baño en las aguas termales de Hot Springs. Y también puedes disfrutar de las playas, la mayoría de arena negra.