Sucede, con el paso del tiempo, que las obras que fueron escondidas por los ladrones reaparecen en el mercado, como sucedió con la obra de Koninck”

Jean-Yves Le Drian, ministro francés

El FBI de Estados Unidos devolvió ayer un cuadro del pintor holandés Salomon Koninck de 380 años de antigüedad a sus legítimos dueños, una familia francesa judía, 75 años después de que fuera robado por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial y, con el transcurso de los años, apareciera en manos de una coleccionista chilena.

Un caso que, en su arista local, se originó el 28 de agosto de 1952, cuando el empresario chileno Guillermo Stein Moring compró en Münich, Alemania, la pintura denominada “A Scholar Sharpening His Quill" al mercader Walter Hofer, ligado al robo de arte ordenado por el comandante y fundador de la Gestapo, Hermann Goering. Stein pagó 45 mil marcos y tras su muerte (1987) la obra pasó a su hija, Renate Stein.

Pero cuando ésta última intentó vender la obra en Christie's Nueva York (a fines de 2017), la casa de subastas detectó la historia que había tras el cuadro y lo entregó a las autoridades de ese país.

Acuerdo con EE.UU.

Según la traducción del acuerdo con las autoridades de Estados Unidos, la Fiscalía para el Distrito Sur de Nueva York y el FBI pactaron con Renate Stein que ella “renuncia voluntariamente a todos los derechos, títulos e intereses que pueda tener en la obra con el fin de permitir su devolución a los herederos de (la familia) Schloss”.

Al respecto, el abogado de Christie's en Chile, Alvaro Carreño (de Carey & Cia.), señaló que “con este acuerdo, todas las acciones iniciadas localmente por el consignador de la pintura (Renate Stein) pierden todo sustento y se demuestra que la empresa (Christie's) ha actuado en todo momento de manera impecable”.

Ello, luego de que Renate Stein se querellara en Chile contra Christie's y su representante, Denise Ratinoff, por el supuesto delito de tráfico de arte, entre otros.

Al intentar contactar al representante en este caso de Renate Stein, el abogado Jorge Martínez, una asistente señaló que no realizarían declaraciones.

Entrega a bisnietos de víctima

Ayer la obra fue entregada a la familia judío francesa Schloss en una ceremonia realizada en el Consulado de Francia en Nueva York, a la que asistió el ministro de Relaciones Exteriores galo, Jean-Yves Le Drian.

“Robado en nuestro territorio por la Gestapo y trasladado a Münich con la complicidad de colaboradores franceses en 1943, habíamos perdido su rastro", explicó sobre el cuadro Le Drian, quien estuvo acompañado por el fiscal del Distrito Sur de Nueva York, Geoffrey Berman, y el representante de la oficina de investigación criminal del FBI en Washington, Michael Driscoll.

“Finalmente se está encontrando con sus nuevos dueños de nuevo: los herederos de Adolphe Schloss (un coleccionista de arte francés) y sus cinco hijos”, agregó el ministro.

Presentes en la ceremonia de ayer estaban los bisnietos de Schloss, Laurent y Michel Vernay, así como su nuera, Eliane Demartini, que describieron la devolución de la obra como una “pequeña victoria” y recordaron que aún hay muchas piezas de arte que fueron robadas y no han sido encontradas.

Estuvo en el Museo de Hitler

Según Christie's, la pintura devuelta ayer fue parte de las 333 obras del norte y sur de los Países Bajos del coleccionista galo judío Adolphe Schloss. Una colección que fue confiscada tras la ocupación alemana de Francia, como parte de una operación dirigida por el régimen nazi para apropiarse de las obras de arte en poder de judíos. “Así, la colección Schloss se destinó específicamente al museo de arte de Hitler en Linz (Austria)”, señaló Christie's el año pasado.

Después, todas estas obras, incluido el Koninck, se enviaron a la sede central de operaciones de Hitler en Münich, donde permaneció almacenada hasta la caída del régimen. “Fue robada nuevamente, con muchos otros cientos de cuadros, antes de que los aliados tomaran control del edificio. La pintura reapareció en Münich en 1952, cuando fue vendida a Stein”.

Ayer el representante de Francia destacó que su país continúa con sus esfuerzos por acelerar la identificación y restitución de las obras robadas durante el régimen de Hitler, y apuntó que más de dos tercios de las 100.000 piezas usurpadas por los nazis fueron encontradas poco después del fin del conflicto.

El resto, agregó, no han sido halladas, pero Francia “nunca se ha rendido en su búsqueda. Algunas habrán sido destruidas, pero sucede, con el paso del tiempo, que las obras que fueron escondidas por los ladrones reaparecen en el mercado, como sucedió con la obra de Koninck”, dijo el ministro galo.

LEER MÁS