Miguel Díaz-Canel finalmente se convirtió en el Presidente de Cuba. Es el primero, después de casi seis décadas, que no tiene el apellido Castro. Y de paso, su esposa, Lis Cuesta Peraza, pasa a ser —sin bullicios mediante— la Primera Dama de Cuba, aunque el sistema político de la isla no contempla esta figura (bueno, recordemos que Francia tampoco lo hace y poco importa).

Lis, de 47 años, nació en la ciudad de Holguín. Es directora del departamento de Servicios Académicos de la Agencia Paradiso del Ministerio de Cultura.

Pero Lis no se transformó en la ahora Primera Dama de un día para otro. El destino la puso junto al actual Mandatario. Miguel Díaz-Canel fue enviado en 2003 a Holguín como primer secretario del Partido Comunista en la provincia.

Allí se conocieron y no fue un amor fácil. Para ese entonces, el actual Presidente cubano estaba casado con Marta Villanueva, con quien tenía dos hijos.

Lis es graduada en Licenciatura en Pedagogía en Holguín, luego hizo un máster en Ciencias Pedagógicas y trabajó primero en el Departamento de Comunicación del Sectorial Provincial de Cultura y después se fue a dirigir el Centro Provincial del Libro y la Literatura. Estando allí, conoció a su actual pareja.

Marta y Díaz-Canel terminaron divorciándose y Lis casándose con él. Ella también tenía dos hijos de su anterior matrimonio con un militar.

Hasta el momento, en el cargo de vicepresidente, rompieron la tradición de la mujer que no aparece en los actos públicos. Para las últimas elecciones fueron juntos a emitir su voto, ambos viajaron a Corea del Norte y Japón en 2005 y Lis fue recibida como Primera Dama.