Para su familia y amigos siempre ha sido “El Gordo”, porque nació de cuatro kilos y medio. A los seis años adelgazó, pero conservó el apodo. Y le cayó otro: “Colorín” porque de los nueve hermanos —ocho hombres y una mujer— tenía el pelo más rojo.

Lleva la política y la agricultura en la sangre. Por el lado paterno, Horacio Walker Larraín, su abuelo, fue uno de los fundadores de la Falange, ministro de González Videla y embajador en Perú en el gobierno de Frei Montalva. “Antes de partir a Lima entregó su campo cuando empezó el proceso de la reforma agraria”, explica el nieto. Don Horacio recibió bonos de la Cora por sus tierras en San Francisco de Mostazal, pero valían tan poco —dice— que hablar de venta no le cuadra. “Quiso dar un ejemplo”, cuenta Antonio.

Hernán Prieto Subercaseux, el abuelo materno, era de derecha y fue el primer alcalde de Pirque, donde el futuro ministro vivió hasta los seis años. “No lo expropiaron, tenía un pedazo muy chico”.

Sally, su madre, se casó con un simpatizante de la DC, el abogado Ignacio Walker Concha, quien nunca militó. Fue regidora (concejal de la época) de Pirque por la DC, dejando en el camino al fallecido Claudio Orrego Vicuña, padre del intendente. “Crecimos hablando de política. Siempre había gente de la a la z en la casa”. Los nueve Walker Prieto y sus padres simpatizaban con la DC, votaron por el No y por la Concertación para las presidenciales. Pero a partir de la primera elección de Michelle Bachelet “empezó la división y se empezó a equilibrar la cosa”.

—¿Qué dice la familia Walker DC frente al hermano que va a ser ministro de un gobierno de derecha?

—De un gobierno de centro derecha. Antes de apoyar en la última campaña a Sebastián Piñera, hablé con los tres militantes parlamentarios y les dije que, si no los afectaba, me gustaría integrarme al comando. Los tres me dijeron: “en esta familia no hay órdenes de partido” y me dejaron en libertad de acción.

—Se juntaron a celebrar cuando te nombraron ministro.

—No fue una celebración, sino un reconocimiento a mi trayectoria gremial y política. Faltaron dos que no estaban en Santiago.

—¿Qué habrían opinado tus padres que apoyaron siempre a la DC?

—Tanto mi papá como mi mamä habrían estado muy orgullosos de que un Waker llegara a ser ministro del Presidente Piñera.

—¿Como crees que ve la derecha que un miembro de un importante clan de la DC, que impulsó la reforma agraria, sea la cabeza de Agricultura?

—Hay gente que tiene mucho más autoridad que yo para opinar de la reforma agraria. No quiero meterme en un tema que dividió a los chilenos. Prefiero los temas que nos unen. Yo he visto una agricultura que se ha desarrollado por el respeto a la propiedad privada y al medio ambiente, y la apertura al mundo.

La relación familiar Walker-Piñera

—¿Cómo hay que leer tu nombramiento: es un guiño de Piñera a la DC?

—El Presidente Piñera me a va buscar, porque le interesa el mundo independiente de centro. Porque, lógicamente, hacia allá se puede ampliar Chile Vamos.

—¿Es una señal para ese mundo?

—Yo creo que sí. Yo siempre he votado por el Presidente Piñera, desde que se presentó a senador (en 1989).

Y se explaya: “Es la persona más de centro que conozco. Venimos del mundo humanista cristiano. En mi casa siempre oí hablar de la familia Piñera. Mi mamá era una enamorada de don Bernardino, porque era muy religiosa. Mis cuatro tías Walker se confesaban con don Bernardino y mi mamá también”. Y siguen los vínculos: su hermano Ignacio es muy amigo de Pablo “Polo”Piñera, y su única hermana, Tere, de Magdalena “Pichita” Piñera. “Siempre oí decir a mi padre que había dos personas brillantes: un francés que no me acuerdo y Sebastián Piñera”.

Hay una diferencia, eso sí, en los estilos de negocios: su papá, que forjó un patrimonio no menor con la mina de zinc, plomo y plata El Toqui, en Aysén, y compró 850 hectáreas en el Maule que plantó de frutales junto a Antonio, jamás compró una acción en la bolsa. Piñera hizo gran parte de su fortuna así.

Patrimonio y posibles conflictos de interés

Técnico agrícola del Inacap, viajó a estudiar Fruticultura en la Universidad Politécnica del Estado de California y a su vuelta, en 1985, tomó las Páginas Amarillas y mandó a su CV a todas las exportadoras. Lo contrató Frutasa, de Ramón Schuler, y se fue a vivir a Curicó, de donde nunca más se movió. Trabajó tres años. En 1987, su padre vendió la Minera El Toqui, le encargó a su hijo buscar tierras para invertir en fruticultura, mientras en paralelo atendía en su estudio de abogados a grandes empresas como Metro, Colbún y la francesa Spie Batignolles, la dueña original de Valle Nevado.

Antonio escogió un campo de 111 hectáreas en Morza, en la comuna de Teno, que plantó de kiwis, “pero nos fue pésimo, llegamos tarde al boom”. En el segundo, 130 hectáreas en Marengo, Curicó, les fue estupendo con las frambuesas, las variedades bicolores de manzanas y las peras. Y vino el tercero en Río Claro y el cuarto en San León, hasta completar 850 hectáreas.

Cuando murió el pater familias, hace 12 años, sus hermanos que no eran agricultores decidieron vender y él buscó socios. Invitó a Ramón Achurra, dueño de la exportadora Rucaray, a la que entró Walker como accionista, y Miguel Vial. Más tarde, la rama de María Teresa Solari, socia de Falabella y dueña de la exportadora David del Curto, también entró a la propiedad de Agrícola Wapri (las iniciales de sus apellidos) que fundaron él y su padre).

“Cuando me preguntan ¿qué has hecho?, yo digo que he plantado un millón y medio de árboles frutales. Lo encuentro más bonito a que te clasifiquen por el número de hectáreas”.

Cuenta que está preparando su declaración de patrimonio e intereses y que, obviamente, deja la administración de su agrícola, la gerencia general y los directorios.

—¿Y la relación de tu empresa, que tiene otros socios, con el Estado? Ustedes piden derechos de agua.

—Cuando haces un proyecto de riego te presentas a un concurso y si lo ganas, el Estado te bonifica una parte de la inversión. Te la bonifica, porque el riego tecnificado es mucho más eficiente que por surco, ya que dejas agua disponible para el resto. Agrícola Wapri no va a poder seguir pidiendo derechos de agua. Tengo un buen estudio de abogados que está viendo este tema.

Con sus seis hijos y su mujer recorrió la carretera austral en una van arrendada. “Llegué con las pilas súper cargadas el miércoles”.

—Lo que hace grande a un ministro de Agricultura es el tipo de cambio. Y te va a tocar un dólar bajo. ¿Qué piensas hacer?

—¿Quién más que el ministro de Agricultura quiere que el tipo de cambio sea competitivo y estable? Lo primero que hago todos los días es ver el precio del dólar. Los ministros que han tenido el tipo de cambio alto han durado cuatro años: Jaime Campos con Lagos y Carlos Furche, el actual. Me hubiera encantado el tipo de cambio que tuvieron ellos dos, grandes ministros, pero parece que no voy a tener esa suerte.

Rodeo:

“No nos vengan a dar clases los santiaguinos”

Fundador de una asociación gremial, dos corporaciones, ex presidente de Fedefruta, conoce el agro por dentro. Asociarse o morir será su lema, es decir, que pequeños agricultores y los del agro familiar campesina unan fuerzas para competir. “Vamos a contratar la mejor asesoría e insumos para vender los productos en Chile y afuera”.

En La Araucanía espera impulsar la paz social y después la fruticultura. “Tiene clima, suelo y agua”.

Rodeo: “deporte nacional maravilloso, no nos vengan a dar clases de cuidar animales los santiaguinos”.

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