Palpitaciones o percepción de latidos rápidos y disparejos en el pecho son los síntomas más típicos de la fibrilación auricular. “Muchas veces se perciben más cuando el paciente está tranquilo o acostado. Otros notan una reducción de su capacidad física, mayor cansancio cuando hacen ejercicios o en actividades cotidianas”, sostiene Alex Bittner (43), médico cirujano de la Universidad de Concepción (especialista en Medicina Interna, Cardiología, Arritmología y Electrofisiología Cardiaca de la Universidad Católica) y cardiólogo electrofisiólogo de la Red de Salud UC Christus.

La población con fibrilación auricular, dice, se muere 1.5 a 2 veces más que la que no tiene fibrilación auricular. Además, alrededor de 20 a 30% de todos los accidentes cerebrovasculares están relacionados con la fibrilación auricular. “Quien padece fibrilación auricular presenta un riesgo cinco veces mayor de desarrollar un accidente cerebrovascular”, dice Bittner, quien cuenta con una subespecialización en Electrofisiología Cardiaca en el Hospital de la Universidad de Münster, Alemania.

Y agrega: “En ocasiones, la fibrilación auricular puede descompensar absolutamente, desarrollando una insuficiencia cardiaca. También puede haber dolor u opresión al pecho, mareos, o incluso desmayos. Hay otros pacientes que sienten poco la arritmia o se acostumbran a ella, pensando que es normal. En esos casos, el diagnóstico puede dilatarse; solo se hará evidente tomando el pulso o al realizar un electrocardiograma de rutina”.

Para entender la base de la fibrilación auricular el cardiólogo explica que el corazón tiene dos tipos de cámaras: las aurículas (cámaras superiores del corazón), donde se origina el estímulo eléctrico que da origen al ritmo normal del corazón, y los ventrículos, que son las cámaras musculosas que bombean la sangre con fuerza hacia las arterias generando el pulso. “La fibrilación auricular es un tipo de arritmia muy frecuente, que consiste en un desorden total de la actividad eléctrica de las aurículas; un “caos” eléctrico auricular, que se traduce en latidos cardiacos absolutamente irregulares, disparejos, y muchas veces rápidos”, comenta el cardiólogo.

El problema que lo produce, dice, es esencialmente eléctrico, y tiene que ver con áreas del tejido auricular. “Estas zonas son capaces de generar impulsos eléctricos rápidos, terminando por desorganizar la actividad eléctrica auricular completamente. Muchas veces ocurre en corazones que tienen alguna alteración, como aurículas más grandes o con pequeñas cicatrices”, comenta.

La fibrilación auricular, enfatiza, se presenta principalmente en adultos, y es más frecuente a mayor edad. “Estudios recientes muestran que en personas de más de 20 años alrededor de un 3% de la población la padece, mientras que en mayores de 80, se estima que al menos el 10% tiene fibrilación auricular”, comenta.

—¿Cómo con el paso de los años el corazón desarrolla esta condición?

—Con el tiempo los tejidos envejecen y también el tejido del corazón; ese envejecimiento da la posibilidad de desarrollar pequeños cortocircuitos en el tejido auricular lo que contribuye al desarrollo de esta arritmia. Este proceso es más acentuado en quienes tienen algunas condiciones como hipertensión arterial, diabetes, enfermedad estructural del corazón u obesidad, entre otras.

—¿Qué sucede con los deportistas?

—Se sabe que los que cuentan con alto entrenamiento físico, como maratonistas o triatletas tienen más riesgo de desarrollar esta arritmia. El entrenamiento muy intenso puede modificar las dimensiones de las aurículas. Además, se produce una regulación a veces exagerada del sistema nervioso autónomo (parte del sistema nervioso que regula las funciones no voluntarias, como el latido cardiaco, ventilación y función del tubo digestivo), esto podría favorecer la aparición de esta arritmia. Lo más saludable es realizar ejercicio recreativo o competitivo, pero sin exagerar.

—¿Cuáles son los principales factores de riesgo?

—La edad, enfermedades cardíacas previas como insuficiencia cardiaca, enfermedad coronaria, de las válvulas del corazón, y factores de riesgo cardiovascular, como hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad, consumo elevado de alcohol y apnea del sueño, entre otras. El cigarrillo afecta negativamente al corazón, pero la relación directa con esta arritmia es más débil.

La largada oficial de la decimoquinta versión de la Regata Chiloé Santander - Bicentenario de la Armada de Chile 2018 será el próximo sábado 20 de enero y comenzará nuevamente en Castro. En total serán más de 75 barcos participantes (hasta ahora hay 84 preinscritos), en las siete categorías (Soto 40; IRC, IRC Chile, Crucero; J/105, J/70 y J-24), en las que se divide la carrera náutica y que reunirá a más de 700 veleristas amateurs y profesionales de Argentina, Chile, España, Italia y Portugal.

La quinta fecha del Campeonato Santander Oceánico 2017-2018, tiene contemplada recalar en cuatro localidades antes de finalizar en Puerto Montt, el próximo 27 de enero: Dalcahue, Mechuque, Hornopirén y Calbuco, en una semana de navegación.

Pablo Lorca, director ejecutivo del Club Náutico Oceánico, entidad que organiza la regata comenta que “en esta versión, la cuarta de los Soto40, la flota está más competitiva que nunca y el panorama es incierto para jugársela por un favorito. Es súper destacable la gran cantidad de navegantes nacionales, además del debut de Sirtecom de Walter Astorga y Yali de René Vidal, totalizando nueve barcos en el archipiélago”. Señala que “el Pisco Black trae dos refuerzos, el español Guillermo Altaldil y el ex olímpico Felipe Echenique, chileno, radicado en Brasil. Dos timoneles son seleccionados chilenos olímpicos, Benjamín Grez (Pisco Black) y Andrés Ducasse (Apolonia). El único Soto sólo con chilenos es el BTG Pactual de Jorge Errázuriz, quien además corre con tres mujeres”.

A Chiloé llegan como líderes Santander de Jorge Araneda, en Soto40; Caleuche de la Escuela Naval, en IRC; Cape Horn de Bernardo Emhart, en Crucero, y Grand Slam de Patricio Seguel, en J/105.