Para mí el rock es básicamente eso, es la transgresión de imponer ideas".

El conductor de radio Sonar Alfredo Lewin (46) ha hecho una carrera de más de veinte años dedicados al rock and roll internacional y chileno. Luego de estudiar Literatura en la U. Católica, fue reclutado por el canal MTV para ser conductor de la versión latinoamericana que recién se lanzaba en 1993. Lewin se transformó en ícono de la versión latina. Allí entrevistó a grupos emblemas de los noventa, como Pearl Jam y Nirvana, pero también a clásicos como The Rolling Stones, Led Zeppelin y AC/DC. Músicos que eran ídolos para Lewin y que creció viéndolos en pósters en su pieza.

No tuvo una infancia fácil: su padre murió cuando tenía 2 años y cuando tenía 13 años, su madre se alejó. Por eso, explica que su gran influyente para que más tarde estudiara Literatura fue su tía abuela Olga. Fue tal su fascinación por los libros, que incluso pensó en ser bibliotecario o profesor de Castellano.

—¿Cómo analizas tu paso por la radio Sonar?

—Esta es la cuarta radio en la que trabajo. Empecé a trabajar hace 20 años. Y para mí, trabajar desde el día uno en la radio, hizo toda la diferencia, yo tengo la camiseta puesta de toda la historia de esta radio. Y el Radiotransmisor, que es mi programa de las tardes, es el programa emblema de esta radio, porque es el programa que partió desde el día uno, en julio de 2009. Y eso no es menor.

—¿Extrañas hacer más televisión?

—No, no lo extraño para nada. Estamos en los últimos tres capítulos de la segunda temporada de un programa de monumentos, en el 13C, que se llama Mementos. Pero la televisión me agobia por el tiempo que requiere de preproducción.

—Hace algunos años se te vio en el programa "Ojo con el libro", haciendo entrevistas a escritores, una faceta que no se te conocía.

—Es parte de mi ADN, yo estudié Literatura. Soñaba con ser bibliotecólogo, y de hecho estuve un año estudiando Bibliotecología. Y recuerdo el consejo de un compañero, Gonzalo Oyarzún, quien me dijo: "lo que tú necesitas es estudiar Literatura". Y él me inspiró para que me cambiara. Pero en el colegio fantaseaba con ser profesor de Castellano o bibliotecario.

—¿Pero no es el bibliotecario y el profesor de Castellano el anti-rock?

—Claro, pero para mí, que me tocó estudiar mucho, por ejemplo, a Noam Chomsky, me parecía que Chomsky era muy rock, al igual que cineastas que quiebran esquemas, imponen puntos de vista acerca del mundo. Eso es muy rockero. Para mí el rock es básicamente eso, es la transgresión de imponer ideas.

—¿Y el llegar a la literatura cuando eras joven, fue influenciado por tus padres?

—Pasa por mi tía abuela quien fue parte importante de mi crianza. La tía Olga era doctora y ella incentivó en mí la lectura. Mi papá murió cuando yo tenía dos años, así que a mi papá no lo conocí, y con mi mamá, perdí mucho contacto como a los 12 o 13 años, entonces como que mi mamá no inculcó muchos valores de ese tipo ni ninguno, en realidad.

—¿Por qué perdiste contacto con tu mamá?

—Lo he conversado con mi hermana ahora y quizás a mi mamá, quedándose viuda, le costó relacionarse con sus dos hijos hombres y le fue más fácil relacionarse con su hija mujer. Y con temperamentos como el de ella y como el mío, no es raro que yo haya terminado viviendo con otro familiar. Y también viví en familias de mis amigos del colegio. Esas familias rescataban que yo era una muy buena influencia, porque yo era ordenado, recatado. Es raro porque secretamente se estaba incubando un gusto por el rock y todo eso.

—Y ese gusto por el rock te llevó a MTV. ¿Cómo fue para ti esto de entrevistar a tus ídolos?

—Era muy freak, en las entrevistas, cuando estás mirando ese rostro que era el mismo que había estado en la pared de tu pieza. Pero logré la dosis justa con ser fan, y el control de periodista. En muchos casos hice historia porque las primeras entrevistas para Latinoamérica a The Rolling Stones, U2, Madonna, las hice yo. Lo hice tratando de mantener la mandíbula bien puesta, que no se me terminara de caer (ríe).

—Los Tres celebraron el año pasado el Unplugged que hicieron en MTV en la época que tú estabas ahí. ¿Cuánto influenciaste para que Los Tres tocaran el Unplugged?

—Una de las representantes de Los Tres, Carmen Romero, me decía que el grupo querían tocar para MTV. Entonces en un lugar en Miami Beach, que se llamaba Roses, arreglamos para que tocaran en vivo y uno de los representantes de MTV, Álex Pels, los viera. Llegó media hora tarde, pero los alcanzó a escuchar. Y le dice a la Carmen: "pero qué buenos que son". Yo estaba ahí viendo todo esto, en la barra del bar. Y luego de unos meses se cocinó todo para que tocaran el Unplugged.

—¿Es verdad que tocaste en dos bandas?

—Sí, el 89 toqué como vocalista con una banda que se llamaba Chronos, a los 18 años, y luego estuve en una banda que se llamaba Diva, a los 21. Todavía tengo contacto con ellos, pero como que estaba tirando para abajo a esas bandas (ríe).

LEER MÁS