La causa de la muerte ha sido por derrame cerebral, traumatismo cerebral y torácico". Fiscalía boliviana.

La alocución del Presidente Evo Morales y sus colaboradores en Palacio Quemado dejó en evidencia la tristeza que se vive hoy en La Paz. El asesinato del viceministro de Interior, Rodolfo Illanes, a manos de cooperativistas mineros que mantienen bloqueadas las carreteras en Bolivia, caló muy hondo en el Ejecutivo y de paso gatilló la peor crisis política en los diez años de mandato del Presidente Evo Morales. Incluso, anoche, el ministro de Defensa del país, Reymi Ferreira, rompió en llanto cuando hablaba del hecho a la televisora Red Uno. "Siento que esta conspiración permanente usando a los discapacitados, opositores haciendo movilizaciones, usando al transporte pesado y ahora a los cooperativistas para llevar luto al pueblo boliviano", sostuvo hoy el Presidente. El suceso se da justo cuando sindicatos cocaleros presionan para que el Mandatario sea nuevamente candidato a la Presidencia tras perder el referéndum

Así, con el pasar de las horas se van conociendo más detalles del fatídico desenlace de la autoridad.

Se ofreció él mismo

Illanes, de 58 años, abogado y casado (dos hijos), era un hombre muy cercano a Evo Morales. Desde 2006 que trabajaba con el Presidente, primero como su asesor jurídico. En estos diez años, había pasado de puesto en puesto en La Paz hasta que en marzo pasado fue nombrado viceministro de Régimen Interior y de la Policía, cargo que actualmente desempeñaba y por el que, debido a su responsabilidad, pidió atender el conflicto minero.

Es más, fue el propio Illanes el que solicitó ir a negociar con los manifestantes, convencido de la posibilidad de encontrar predisposición al diálogo de parte de los cooperativistas, movilizados desde hace dos semanas contra Ley de Cooperativas (ver recuadro).

Llamó varias veces

Ayer por la mañana, bien temprano, Illanes partía a la localidad de Panduro, a 186 kilómetros de La Paz, para intentar negociar la suspensión de las protestas de los mineros. Pero antes de que dijera palabra alguna, casi a las 10:00 de la mañana, la autoridad fue retenida por los manifestantes.

En su cautiverio, Illanes, llamó varias veces por teléfono al gobierno para pedir que la comisión de autoridades que exigían los mineros fuera a liberarlo. Después dejó de comunicarse. Al mismo tiempo, la policía boliviana reprimía el bloqueo de la carretera La Paz-Oruro, una de las más transitadas del país.

Según contó el capitán Freddy Bobarín, que acompañaba a Illanes al momento de ser retenido y logró escapar de los mineros. La situación en un primer momento fue muy tensa, pero no particularmente violenta. Todo cambió radicalmente, según Bobarín, cuando los mineros se enteraron de la muerte —presuntamente a manos de la policía— de uno de sus compañeros que protestaba en la carretera. Es su tercer fallecido, y generó que los manifestantes enfurecieran. Uno lanzó una piedra y se desató el linchamiento. Bobarín logró soltarse, escapar y contar lo que había pasado. Sin embargo, no sabía aún que Illanes estaba agonizando o muerto.

Al parecer, y como informa el diario La Razón, la suerte de ambos estaba echada. "Creemos que si hay algún movimiento de las fuerzas policiales, estamos dispuestos a ofrendar vidas. Pero seguro que él (el ministro de Gobierno Carlos Romero) será responsable de todo lo que va a suceder y lo primero que vamos a hacer es amenazar: está el viceministro (Illanes) con nosotros; pasa algo, al primero que vamos hacer… Tenemos dos cajones, van a ser los dos que van (a estar) en los cajones; hay un policía que está detenido. Armados, bien armados habían venido", advirtió un dirigente a una radio local.

Pasaba el tiempo y la cosa se ponía más tensa. "Ya no vamos a negociar con él (con el ministro de Gobierno Carlos Romero) y que presente su carta (de renuncia); si no, vamos a colgar a su viceministro y yo me voy a encargar (de esa acción)", amenazó el mismo cooperativista.

El gobierno se paralizó. Tardaron cinco horas en dar a conocer la situación públicamente. Tras horas retenido, Illanes murió entre las 17:30 y las 18:00 horas. Fue el propio Romero quien informó el fatal desenlace. "A esta hora de la presente jornada (21:00), todos los indicios señalan que nuestro viceministro Rodolfo Illanes ha sido cobarde y brutalmente asesinado".

Su cuerpo apareció tirado de madrugada a un costado de la carretera.

Según los primeros datos de la autopsia, entregados hoy por la fiscalía boliviana, "la causa de la muerte del viceministro Illanes ha sido básicamente un derrame cerebral, tenemos traumatismo cerebral y torácico; tenemos también costillas fracturadas". Como publica el diario La Razón, fue "golpeado y torturado" hasta la muerte.

Conflicto boliviano

Qué son las cooperativas mineras y qué es lo que quieren

Este sector, uno de los más organizados y agresivos que componen la Central Obrera Boliviana, exige la derogación de una ley recientemente aprobada, la cual pone límites al funcionamiento de estas "cooperativas" que administran y explotan yacimientos mineros. Los administradores rechazan la ley promulgada por el Presidente Morales pues, dicen, la misma inviabilizaría sus actividades. Uno de los puntos de esta ley permite la formación de sindicatos en ese tipo de instituciones, algo que el sector considera perjudicial. Además rechazan que concesiones mineras sean otorgadas en contrato de arrendamiento por la Corporación Minera de Bolivia y exigen que las empresas privadas puedan invertir en sus concesiones, algo que está prohibido en el país, donde los recursos naturales fueron nacionalizados por el gobierno de Morales.

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